Medio Ambiente

"EN NINGÚN MOMENTO NOS AVISARON QUE IBAN A METERNOS UNA PLANTA PROCESADORA DE ASFALTO A NUESTRAS CASAS"

A través del engaño, sin un Estudio de Impacto Ambiental (EIA) y sin los permisos ambientales correspondientes, a menos de 200 metros de la población en la Vereda Cristales en Barbosa (S.S), se viene implementando la realización de una planta procesadora de asfalto.

Últimamente, Barbosa (S.S) viene padeciendo golpes certeros por parte de las personas que administran sus intereses. El caso que nos ocupa tiene que ver con una planta procesadora de asfalto que vienen implementando en la parte alta del Río Suárez (Vereda Cristales) que no cuenta con las licencias ambientales y permisos correspondientes para su realización. Según Luis Lorenzo Rojas, representante del comité ambiental de la vereda, "la empresa de asfalto en estos momentos no cuenta con los permisos, tanto de la CAS regional Vélez como el de Planeación Municipal, además de licencias ambientales y una cosa fundamental que ellos han querido desconocer, el permiso de la comunidad", afirma. 

Según Rojas, "en este momento se están violando los derechos fundamentales a más de 400 familias que allí residen". La preocupación es latente y preocupante, ya que por ningún lado el personero municipal ni la alcaldía, ni los órganos de control y entidades ambientales se han pronunciado ante el hecho. Algo alarmarte, pues se trata de la vida y de los derechos fundamentales de las familias que allí habitan. Además, de la vulneración a la Ley General de Medio Ambiente y al Código Nacional de Recursos Naturales, pues es la diversidad de vida silvestre, fauna y flora las que se verán fácilmente afectadas. 

La norma ambiental describe fielmente que estas plantas procesadoras deben estar instaladas en zonas despobladas o en sitios que no tengan habitantes mínimo en 2 kilómetros a la redonda, pues pueden ser perjudiciales para la salud de las personas. Son tan solo 200 metros los que separan este proyecto de la comunidad y eso es lo más alarmante. "Nosotros somos una vereda pequeña y prácticamente las casas están unas sobre la otra, en este momento nuestra vereda tiene más de 400 viviendas y ellos están violando ese derecho fundamental que es el derecho a la vida, representado en el derecho a respirar aire puro, la mejor herencia que les podemos dejar a nuestros hijos y nietos, contrario a dejar calles pavimentadas y arregladas. La vida es la vida", comenta Rojas. 

La comunidad exige que se les respeten sus derechos. Que la secretaria de Planeación Municipal sea seria y se acerque, pues según Rojas, hasta el momento solo les han mamado gallo y tomado del pelo. "Nosotros en este caso queremos que se nos respeten nuestros derechos. Fielmente nos los están vulnerando. El secretario de Planeación Municipal quedó de venir a una reunión el sábado pasado pero nos incumplió. Siempre nos han dicho mentiras, viéndonos la cara y por eso estamos en el día de hoy protestando". 

Lo cierto es que nunca hubo previo aviso para la realización de dicho proyecto. No ha habido socialización del Estudio de Impacto Ambiental, necesario para este tipo de casos, que indique cuales son los beneficios y consecuencias de una empresa de este talante y lo que es peor, según dicen la misma gente afectada, fue un predio que empezaron a trabajar a la brava, ya que hubo tala indiscriminada de árboles y daños a los ecosistemas y hábitats naturales de esta parte barboseña. Así que, o nos ponemos pilas, o nos contaminan el agua, nos acaban con la diversidad del río, sus animales, su fauna y flora, y lo que es nocivo, nos convierten a Barbosa en cloaca minera.