jueves, 5 de diciembre de 2013

Movilidad

¿Mejor en Bicicleta?

En comparación con el automóvil y la motocicleta, este vehículo no requiere de ningún tipo de licencia de conducción. Basta con conocer algunas señales y dominar la técnica para poder transitar por la calles libremente.

Últimamente en Colombia, en materia de movilidad, las grandes y medianas ciudades vienen caracterizándose por sus embotellamientos y trancones. De hecho, en esta materia, Bogotá es una de las ciudades más caóticas y congestionadas;  la más contaminada de Colombia y la tercera en Latinoamérica. 

En la medida en que las ciudades proliferan y crecen, interminables se vuelven los trancones. Es decir, tener o adquirir un carro implica, en primer lugar, aguantar las consecuencias de una infraestructura vial que se queda -en gran parte- corta y dificulta el traslado; y en segundo lugar, sobrellevar las vicisitudes que se padecen, teniendo en cuenta que la mayoría de accidentes generados son por falta de conciencia vial y tolerancia. Esto, por parte de las mismas personas que conducen los vehículos, que por afán de llegar a sus destinos hacen lo que esté al alcance.

Un estudio realizado por la Secretaria de Movilidad afirma que 22 días en promedio al año son metidos y perdidos en el trancón por parte de quienes viven en la capital del país. Una situación, que aparte de generar problemas serios de salud pública -Jiu Chiuan Chen, epidemiólogo de la Universidad del Sur de California, descubrió que los gases que despachan los automotores durante los trancones afligen la capacidad mental de las personas, así como su inteligencia y estabilidad emocional-, sedentarismo y falta de ejercicio; inciden directamente en el impacto medioambiental, derivado del C02 o dióxido de carbono que emanan los motores.

En este sentido, la bicicleta constituye una excelente alternativa de movilidad, principalmente en una ciudad tan congestionada y alterada como Bogotá; empero también se convierte en una fuente importante que tiene grandes beneficios en temas como la salud física, mental y emocional de las personas. Por consiguiente, “lo que estamos haciendo con “Mejor en Bici” es promover el uso de la bicicleta como medio habitual de transporte. Para eso estamos ofreciendo un servicio que se llama Sistema de Bicicletas en Uso Compartido –SIBUC- para empresas privadas. El objetivo principal es reemplazar carros por bicicletas en los parqueaderos de las empresas, para que los empleados pueden utilizar este medio de trasporte y puedan desplazarse del trabajo a la casa en menos tiempo, e igual o más cómodos que en sus medios habituales de transporte”, afirma Diego Ospina gerente general de Mejor en Bici.

Según Ospina, con esta medida los empleados se ahorran en promedio 17 horas al mes, tiempo en el cual duran “embotellados” en el trancón; ya sea en Transmilenio, en buseta, en taxi o en carro particular. ¿Esta estrategia qué permite? En primer lugar, que se goce de más tiempo libre para disfrutar. Pero también, a diferencia de manejar carro, “no estar estresados y por el contrario con buena energía y buen estado de ánimo para llegar con la mejor disposición al lugar de trabajo. Está comprobado que la bicicleta genera creatividad, pues llega más sangre al cerebro; genera reducción de peso y acondicionamiento físico y forja una cantidad de beneficios adicionales al ahorro del tiempo, que creemos es el principal favor para lo usuarios del sistema”, comenta Ospina.

Otras Experiencias

En países como Holanda, Francia, España –entre otros-, la bicicleta está tomando un papel importante convirtiéndose su uso en un fenómeno. La gente de estos países opta cada vez más por desplazarse en este medio, pues han adquirido conciencia de los beneficios y particularidades que brinda su uso. Por ejemplo, en Holanda, en promedio el 50% de las personas de Ámsterdam van en bicicleta al trabajo y llevan a sus hijos al colegio. A pesar del frío europeo -en ocasiones están en muy bajas temperaturas-, la gente va a “bici” a todas partes.

Quizás, en todo el planeta, Dinamarca es el país donde emplear la bicicleta se ha a convertido en cultura. Existen rutas en las que los usuarios pueden transitar por varias ciudades, lugares y destinos.

Hace poco tiempo, Ecoosfera publicó un artículo que titulaba: “Dinamarca inaugura amplia red de ciclopistas que cubrirá todo el país”. Allí se explicaba que después de tres años, se realizó un amplio circuito de autopistas, en gran parte del país danés. ¿El objetivo de la estrategia? Incentivar el uso de este medio de transporte en un 30%, reducir los tiempos de desplazamiento y ser uno de los mayores países partícipes en cuestiones ambientales.

El artículo afirmaba que “independiente de todo el apoyo por parte del gobierno, los ciudadanos han sido parte medular en este proyecto que pretende ampliarse de manera significativa por toda Dinamarca, hasta llegar a los 300 kilómetros o más”. Es decir, Bogotá goza de 350 kilómetros de rutas para bicicletas, pero su uso no es como debería ser, aún no es una cultura y está lejos de serlo, teniendo en cuenta que cada vez son más las personas que prefieren comprar un carro o motocicleta.

En este sentido, Ospina afirma: “dije por qué no implementar el Sistema de Bicicletas en Uso Compartido –SIBUC- en Bogotá, si tenemos 350 kilómetros de cicloruta, tenemos una ciudad que es plana, tenemos un clima que es muy agradable -a pesar del invierno actual- e idóneo. Entonces, desde hace unos 8 años lo vengo haciendo (montar bicicleta como convicción propia) y a raíz de una investigación que realicé, vi que hay una gran oportunidad para ofrecer este servicio y para que otras personas disfruten lo que yo vivo en mí día a día”.

10 Razones para “Mejor en Bici”

“Yo no sufro por el trancón” testifica Ospina. Sin embargo, hay muchas personas que sí y eso se ve reflejado en la productividad corporativa. Pueden tener los medios para adquirir la bicicleta, pero no la cultura. Por eso, “nosotros le montamos todo el sistema a la empresa y contribuimos en una forma alternativa de ver la movilidad. Un ejemplo, Unilever (uno de nuestro principales clientes) nos llama y nos pide que lo asesoremos en la implementación de este sistema; nosotros ponemos las bicicletas, ponemos el montaje, ponemos la operación, tenemos personas que hacen el mantenimiento de la flota de las mismas para que estén impecables. Nuestro personal también realiza asesoría a los usuarios de cómo irse, qué ciclorutas seleccionar -de su casa hasta el trabajo, y viceversa-; les hacemos recomendaciones de tipo de seguridad vial y de cómo utilizar las bicicletas”, afirma.  

Indudablemente, conducir automóvil en Bogotá –y varias ciudades de Colombia- es sinónimo de pugna. Se convierte en una “pelea” con otros carros por el trancón constante; un soportar de infracciones. De ahí que haya amargura y descarga de energía. Cuando se disfruta de la bicicleta, se va más contento, más relajado, más seguro y se sabe exactamente cuánto tiempo se demora de un lado a otro; en un automóvil es muy difícil calcularlo.

La “bici” es una forma bastante económica de transportarse. Además de ser un medio de trasporte eficiente, permite e incide en la disminución en las emisiones de gases, permitiendo ahorrar en promedio 150 Kg de CO2 al año por su uso. Aparte de eso, existen 10 razones principales, por las cuales es “Mejor en Bici” comparado con otro sistema de transporte.

Primeramente, porque permite actividad física, que disminuye el estrés y la afectación de la salud mental. Permite sentirse libre. Ahorrar horas de tráfico y pérdida de tiempo. Permite ahorrar dinero y multas. Porque por cada milla pedaleada se evita una libra de dióxido de carbono. Porque 3 horas semanales de pedaleao reduce el riesgo de problemas cardiacos. Porque es más rápido que el transporte público. Porque quita la depresión. Permite conocer mejor la ciudad. Porque el ciclismo como cultura es un importante elemento del futuro ambiental y la ñapa, porque cualquiera puede manejar una bicicleta. En resumidas cuentas, ¡no más trancón, llegó el tiempo de la bicicleta!


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